
Cómo implementar con éxito la Inteligencia Artificial en la industria metalmecánica
La industria metalmecánica es consciente del nuevo rol que debe asumir en un escenario post-pandemia. Pero a la práctica, conceptos clave en la Industria 4.0 está más integrado en procesos de producción tradicionales de lo que realmente se cree. Éste es el caso de la Inteligencia Artificial, una tecnología transversal que puede implementarse a casi cualquier aplicación industrial, como el sector del mecanizado.
De hecho, puede adaptarse a toda la cadena de abastecimiento: desde el momento de la compra de las materias primas y su almacenaje, gracias a las soluciones de análisis de proveedores y de stock óptimo. Pero también tiene incidencia en la producción y distribución de soluciones por su optimización, garantizando una distribución eficaz y a unos costes más contenidos.
La clave radica en el machine learning y el análisis predictivo. La Industria 4.0 tiene su base en algoritmos que contribuyen a mejorar el rendimiento de las plantas de fabricación. De este modo, la IA se convierte en una herramienta eficaz y confiable, para aumentar la competitividad de las empresas metalmecánicas en un mercado cada vez más global y dinámico. A partir del análisis de datos, se pueden optimizar los ciclos de producción, resolver con rapidez posibles errores y reducir las paradas de máquina, pero también incide en la gestión y control del stock disponible en el almacén.
Gestión automatizada en la industria metalmecánica
Una de las aplicaciones más eficaces del uso de la IA en entornos industriales es la gestión automatizada del suministro industrial. Pese a que este supuesto se puede materializar en cualquier industria, lo cierto es que el sector metalmecánico ha implementado con éxito esta tecnología, para mejorar, entre otras acciones, el flujo de existencias en almacén. Esto es posible mediante un data science que predice la demanda y gestiona el stock óptimo con rapidez, de forma segura y, sobre todo, sin errores.
Pero también se consigue una certera predicción de la demanda, para controlar y gestionar los costes en términos de logística y almacenaje, ya que se automatiza el aprovisionamiento de productos, generando un importante ahorro económico para las empresas. También en términos de distribución eficiente de los vehículos de transporte y sobre las rutas, para ganar en eficiencia, además de suponer una reducción del impacto medioambiental en el servicio.
En paralelo, se consigue un alto grado de satisfacción por parte del cliente, ya que se da respuesta a sus necesidades con gran rapidez, pero también se puede obtener predicciones y recomendaciones relativas a la adquisición y gestión eficiente de estas existencias.
Otra aplicación real en empresas metalmecánicas es el mantenimiento predictivo de la maquinaria industrial. Esto se consigue agregando la información de la vida útil del sistema, a partir de la IA. De este modo, se establece un margen de probabilidades en situaciones reales, para actuar con antelación y prever la solución más adecuada en poco tiempo.
Mejorar la atención al cliente en empresas metalmecánicas
La atención al cliente es una de las prioridades de empresas del sector metalmecánico. ¿Por qué no apostar por una solución automatizada para su gestión? Casi sin darnos cuenta, se acumulan datos vitales de clientes que pueden ser una herramienta muy eficaz a la hora de priorizar pedidos. Con la finalidad de mejorar su operatividad y, sobre todo, garantizar un mejor servicio, gracias a la Inteligencia Artificial, se puede mostrar ratios de rentabilidades reales y personalizadas sobre cada cliente.
Con esto se puede abordar con éxito cada pedido, en función de los parámetros de cada cliente y, sobre todo, establecer prioridades en función de los patrones de consumo de cada uno. Esto da como resultado una mayor eficiencia, disminución de los tiempos de entrega, pero, también, se adquieren parámetros hasta entonces no contemplados en términos de experiencia del cliente.
Las posibilidades que ofrece la Inteligencia Artificial en el sector metalmecánico se encuentran, todavía, en fase inicial, pero se ha posicionado como una herramienta que mejorará, a corto plazo, los flujos de producción en el tejido industrial. En este contexto, está claro que la convivencia entre hombres y máquinas será un binomio que perdurará en el tiempo. Siempre será necesaria la figura de un especialista que no sólo sepa interpretar y exprimir las mejores prestaciones de la tecnología que hay al alcance, sino que deberá tener potestad para resolver con éxito cualquier incidencia, sin que perjudique a la cadena de producción.
En este sentido, se abre un nuevo debate sobre la importancia de la formación a pie de máquina, como una de las soluciones más eficaces para mejorar, no sólo el rendimiento productivo, sino también posicionarse en el mercado, para ganar autoridad de marca y ser realmente competitivo en un mercado cada vez más exigente. Éste es una de los temas que se ha fomentado desde Aspromec, la Asociación de Profesionales para la competitividad del Mecanizado, desde su fundación hace ya una década y que también se abordará en el I Congreso del Mecanizado que tendrá lugar el próximo 25 de noviembre en Getafe (Madrid).